La socialización de tu perro es fundamental para su bienestar, ya que lo hace menos reactivo, genera confianza y mejora su comportamiento y felicidad en general. Además, fortalece tu vínculo con él y hace más agradables las aventuras compartidas.
¿Quieres llevar a tu perro a lugares nuevos, conocer gente nueva y pasar tiempo con otros animales? ¡Excelente idea! Pero hay algo que debes saber: socializar a tu cachorro no significa ir directamente a parques para perros o calles concurridas. Es mejor comenzar en lugares tranquilos para que puedas ver cómo reacciona el animal.
La clave de la socialización es ir al ritmo de tu perro y hacer que sea una experiencia positiva. En este caso, lo mejor es avanzar a paso lento pero firme, y con golosinas como refuerzo. Con el tiempo, varía tu rutina de paseo cambiando el recorrido o visitando nuevos parques. Esto mantiene viva la curiosidad y el entusiasmo de tu perro por las nuevas experiencias.
Cuando explores nuevos entornos, presta atención al lenguaje corporal de tu cachorro. Si lo ves suelto y relajado, significa que se siente bien. Por el contrario, si está rígido o indeciso, es posible que se sienta abrumado.
Recompensa el buen comportamiento con golosinas. Si camina bien con correa o no ladra, una golosina puede afianzar su buen comportamiento y reforzar su percepción de que está en un lugar seguro y divertido.
Si tu perro parece nervioso, no te preocupes. Es posible que necesite varios encuentros positivos para sentirse a gusto. Dale espacio y tiempo. Aléjate de la acción hasta que vuelva a calmarse. Si está listo, comerá feliz una golosina. Si no, no hay problema; inténtalo de nuevo otro día.
Recuerda que aunque sepas que tu perro no corre peligro, es posible que debas intentarlo varias veces antes de que se sienta cómodo. Dale tiempo para que desarrolle confianza y pronto disfrutarán juntos unas divertidas perraventuras.
