A todo dueño le ha costado, en mayor o menor medida, que su perro aprenda a obedecer órdenes básicas. Esto no solo hace de tu perro un mejor compañero, sino que también mejora su seguridad en presencia de otros animales, vehículos motorizados y otros peligros posibles.
Aquí encontrarás cinco órdenes esenciales que todo dueño debería enseñarle a su perro:
1. Sentado: Enseñarle a un perro a sentarse es la orden más básica y, a menudo, la más fácil de aprender. Sentarse sobre las patas traseras es un movimiento natural, lo que hace que esta orden sea particularmente sencilla. Además, es una de las órdenes más útiles, ya que es la base para aprender otras órdenes más complejas.
2. Quieto: Cuando tu perro haya dominado la orden “sentado”, el siguiente paso lógico es enseñarle a quedarse quieto. Esta orden le dice a tu perro que permanezca sentado hasta que se le dé una nueva orden. La orden “quieto” es crucial para mantener a tu perro a salvo, por ejemplo, para evitar situaciones peligrosas como correr hacia la calle. Si bien es más difícil de dominar que “sentado”, un perro motivado puede aprenderla en unos pocos días.
3. Ven: La orden “ven” es esencial si quieres llevar a tu perro sin correa, sobre todo en lugares públicos. Ya sea que esté en un parque para perros, lo lleves a pasear por el vecindario o juegue en el patio trasero, esta orden garantiza que tu perro vuelva a ti cuando lo llames. Si bien lleva tiempo dominarla, vale la pena insistir.
4. Junto: Si un perro camina por la calle al lado de su dueño, es probable que haya dominado la orden “junto”. Aunque lleva tiempo y dedicación, esta orden hace los paseos diarios mucho más agradables y manejables.
5. ¡No!: Como los perros no necesariamente distinguen lo que está bien de lo que está mal, si debes usar la orden “no”, asegúrate de mostrarles cuál es la conducta correcta. Si siempre refuerzas lo que sí está bien, es probable que comiencen a tomar mejores decisiones. Existen muchas formas de adiestrar a tu perro, y puedes enseñarle todas las órdenes que quieras. Por lo pronto, las cinco órdenes que indicamos más arriba son un buen punto de partida.
¡Feliz adiestramiento!
